El trabajo de programar y vender apps ya resulta bastante duro para que luego pueda venir alguien y apropiarse del esfuerzo de otras personas a base de clonaciones. Pero existen maneras de evitarlo. En el caso de que llegue a suceder, es muy importante disponer de de pruebas consistentes de la autoría para denunciarlo en los mercados de compra venta de apps. Aquí se explican los procedimientos más indicados para todo ello.
Lo primero que se debe hacer es proteger todos los elementos de la aplicación que sea posible, como es el caso de:
– El nombre: si no es un nombre genérico (como serían “agenda” o “antivirus”) es posible protegerlo como marca. Por ese motivo, cuanto menos genérico sea el nombre, más fácil será su protección. Por tanto, antes de elegir el nombre hay que asegurarse de que no está siendo ya utilizado, por ejemplo buscándolo en más de un mercado de apps o, simplemente, en Google.
– El código fuente de las apps: si es original se puede proteger bajo derechos de autor. Es el sistema más económico ya que los autores quedan protegidos desde la creación de sus obras. De todas formas, siempre es más seguro tener una prueba de autoría mediante el Registro de la Propiedad Intelectual, que variará según la comunidad autónoma o país.
– Diseños propios de personajes y escenarios: estos admiten diferentes formas de protección, que van desde los derechos de autor, que son los más económicos, al diseño industrial e incluso la marca. Aquí también hay quecerciorarse de que los elementos a proteger son completamente originales.
Una vez protegida la app, deberá lanzarse en todas las plataformas que se desee, habitualmente Apple Store y Google Play. Si la app tiene éxito, empezarán a aparecer clones. Contra ellos se podrá actuar de la siguiente manera:
– Dirigirse directamente a los desarrolladores del clon: enviar una carta solicitando la retirada de la app alegando que es una copia. Con algo de suerte retirarán el clon. Otra posibilidad es que nieguen que sea una copia basándose en diversos argumentos. Lo peor que puede pasar es que ignoren la petición.
– Utilizar los propios mecanismos de las plataformas: es el sistema más simple, ya que la misma plataforma para comprar apps se encargará de retirar la app plagiada si consideran que existe una infracción. Se puede utilizar el iTunes Content Dispute de Apple o Formulario de Retirada de Contenidos de Google Play.
Como se puede ver, existen métodos suficientes para proteger contra copia nuestras apps, así como para denunciarlo en caso de que suceda. Con estas explicaciones, protegerse contra la copia ilegal de aplicaciones será una tarea más sencilla.
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