De refugiado a millonario con su app la historia de Todoist
El desarrollo y la compra venta de apps pueden ser una línea de negocio digna de tener en cuenta. Y es que en estos días en los que todos llevamos un dispositivo móvil encima que nos sirve para mucho más que hacer llamadas o enviar y recibir SMS, el traspaso de apps está convirtiéndose en la salida que muchos desarrolladores están utilizando, unida a la venta de códigos fuente.
Este es el caso de Amir Salihefendic, el creador de una de las apps orientadas a la gestión y la mejora de productividad con más proyección en el mercado actual:Todoist. Su historia no te dejará indiferente: nacido en la Bosnia de finales de siglo, se vio obligado a abandonar junto, con toda su familia, su localidad natal, Jajce, a causa de la guerra de los Balcanes.
Quizás las penurias, el hambre y la miseria que le tocaron vivir tras convertirse en refugiado fue lo que le dio la energía para convertirse en el creador de una de las aplicaciones más utilizadas en su rama: de hecho, 5 millones de personas en todo el mundo utilizan Todoist a diario. Posiblemente tú seas una de ellas.
Ni rondas de financiación, ni campañas de crowdfunding ni tan siquiera platearse su instalación en Silicon Valley. Todoist nació como un proyecto personal para gestionar el trabajo y la productividad de Amir. Hoy en día, ese proyecto de un estudiante, que además repartía su tiempo en dos trabajos como desarrollador, da de comer directamente a 30 personas y a varios freelance repartidos por todo el mundo.
Esa falta de financiación externa facilita a Salihefendic seguir siendo el propietario de los derechos exclusivos de las apps, con la garantía legal que esto conlleva.
¿Por qué Todoist?
El diseño de interfaz es limpio y fácil de utilizar, pero muy versátil, lo que te permite utilizarla en muchas situaciones: puedes hacer la lista de la compra, llevar la agenda… Solo tendrás que configurar las tareas, crear recordatorios o señalar una dirección.
Grandes beneficios con una inversión mínima
Todoist fomenta el teletrabajo entre los empleados en sus proyectos, algo muy apreciado por los grandes talentos de este siglo. Aunque la empresa cuenta consede en Portugal, el trabajo en sí se realiza de manera remota por parte de trabajadores contratados y freelance de más de 15 países. Esto es, una inversión inicial mínima que cualquier desarrollador podría asumir para lanzar una app.
Otro acierto de Salihefendic respecto a su app, además de ser realmente útil para los usuarios, es su monetización, basada en el modelo freemium: como usuario, descargas y utilizas la herramienta de manera totalmente gratuita y si quieres contar con más servicios, puedes contratarlos por menos de 30 dólares al año. Esta es la única fuente de ingresos de la compañía. Increíble, ¿verdad?
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